Soy vecino de este mundo por un rato
Y hoy coincide que también tú estas aquí
Coincidencias tan extrañas de la vida
Tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir

Disfrutar la vida y ser feliz en ella

miércoles, 24 de febrero de 2010

Aunque el título de este post lleve a muchos compatriotas a pensar en una representante del vedettismo nacional y su popular eslogan que refrenda su estilo de vida, esta interesante reflexión sobre la vida y su propósito es un cuestionamiento existencial al que todos nos hemos enfrentado.

Con los años -y con sus días buenos y malos- yo también me he cuestionado, aunque de manera incorrecta , este sentido de vivir. Pero preguntarnos para qué vivimos, así, en general, no parece tener mucho sentido, o en todo caso, es una forma incorrecta de interrogarnos. Como lo puntualiza en este video Ayn Rad, no existe tal "propósito de la vida" porque la vida es un fin en sí misma. La vida es el propósito de la vida.

Cada uno de nosotros tiene un objetivo en la vida y parte de ese propósito es descubrirlo y vivir por ello. Algo que muchas personas solo descubren en los años maduros de la adultez.  Pienso entonces que tengo la suerte de haber descubierto en buen momento mi pasión y mi vocación: la docencia y las comunicaciones. Tengo además, la suerte de haberme preparado para ello, dedicarme a ambas profesiones a la vez, y además, estar encaminando a mis hijos hacia la realización de sus sueños y de su vida.

Tal y como yo estoy haciendo con la mía.


Vince In Bono Malum

Vence al mal con el bien

Tocaron mi sueño...